Los alcistas son mis amigos

Los principales índices de referencia han experimentado movimientos significativos en el mes de noviembre, cerrando hoy por todo lo alto y presionando los máximos intermedios del verano con subidas muy destacables que han absorbido tres meses de caídas. Su superación dejaría a un paso los máximos históricos de Wall Street, que sigue siendo la locomotora que tira del tren bursátil.

Hemos asistido durante el transcurso de noviembre a un potente contraataque alcista alimentado ya por el espíritu navideño y el esperado rally de fin de año, que cada año se adelanta más. La perspectiva del final de las subidas de tipos de interés ha generado también optimismo entre los inversores, lo que ha retroalimentado la demanda por las acciones. En poco más de un mes hemos pasado de mirar a los infiernos a mirar al cielo. ¡Así es la bolsa!

¡Contraataque alcista en toda regla!

A corto plazo hay cierta sobrecompra, pero no podemos hablar de optimismo exacerbado, ni mucho menos de euforia, cuando todavía son muchas las voces que hablan de recesión en 2024, sugiriendo que disfrutemos del momento, porque durará poco.

Más allá de interpretaciones y ciñéndonos a los hechos, los alcistas han dado un importante golpe en la mesa y los mínimos del mes de octubre se han convertido en línea divisoria entre un escenario de continuidad alcista y uno correctivo más amplio. Mientras resistan dichos mínimos, niveles como son los 33.237 puntos de Dow Jones, o los 4.104 puntos de S&P 500, como analista e inversor me debo a la tendencia, más que nada porque es mi amiga, mucho más que toda la narrativa imperante.

Para ponernos en contexto, desde los mínimos de 2020 asistimos a una potentísima recuperación alimentada brutalmente con políticas monetarias y fiscales, como nunca antes habíamos visto. Posteriormente una corrección desde finales de 2021 hasta octubre de 2022, y desde entonces, los alcistas presionan para obtener nuevos máximos, con sus correspondientes consolidaciones o correcciones de corto plazo. Todavía no podemos dar por concluida la corrección originada a finales de 2021, puesto que podría necesitar consumir más tiempo y desarrollar alguna estructura más compleja, pero mientras los alcistas sigan al mando a corto plazo y se respeten los citados mínimos de octubre consideraré que la reanudación de la tendencia a plazos largos está en marcha. La subida libre es el objetivo, pero siempre con un estricto control de riesgos. Como dijo Peter Lynch, «el tiempo es tu amigo, el impulso es tu enemigo», y creo que todos tenemos claro que las correcciones debemos verlas como una oportunidad para ir ampliando cartera.

Con una visión de largo plazo, con un estudio pormenorizado de la historia, con sus patrones y recurrencias, podemos decir con mucha convicción que es cuestión de tiempo, considero que más pronto que tarde, que los precios entrarán nuevamente en terreno inexplorado, en subida libre absoluta, que es la situación técnica más alcista que existe. En todo caso, esto es previsión de futuro, quién sabe, pero objetivamente este cierre del mes de noviembre nos comunica con claridad que los alcistas han retomado el mando haciendo oídos sordos de toda la incertidumbre que planea por los mercados y la economía global. Esto ya es muchísima información, como también lo es la máxima bursátil «la tendencia es tu amiga». El miedo hace que muchas veces se cuestione esta amistad, yo procuro no hacerlo. ¡Los alcistas son mis amigos!